Sencillo y táctico, Qawale se inspira en los montoncitos de piedras que se encuentran a lo largo de los caminos. Prepárate para dejarte arrastrar por las idas y venidas de este asombroso juego.
Cada jugador recibe 8 piedras de su color. Hay un tercer color que es neutro. Coloca estas 8 piedras neutras en las 4 esquinas del tablero.
En tu turno, tendrás que colocar una piedra encima del montoncito que elijas y luego mover todo el montoncito dejando una piedra en cada espacio por el que pases. El primer jugador que consiga tener 4 montoncitos en línea y con su color en la parte superior gana la partida.
Un juego de MEBO GAMES
- - 1 Tablero de juego.
- - 8 fichas de color claro.
- 8 fichas de color oscuro.
- 8 fichas de color naranja.
Preparación de la partida:
1. Pon el tablero en el centro de la mesa.
2. Coloca dos fichas naranjas en cada esquina del tablero.
3. Cada jugador coge las 8 fichas del color que ha elegido.
Una partida
En su turno el jugador coloca una ficha en el tablero siempre y cuando la coloque sobre otra ficha. No se pueden colocar en espacios vacíos.
Tras colocar la ficha mueve dicha pila a una casilla adyacente, dejando siempre la ficha inferior sobre la casilla por la que ha pasado. En la que sale no deja nada. Ojo porque no se puede retroceder por dónde has pasado.
Fin de la partida.
La partida finaliza cuando un jugador consiga hacer una línea de 4 fichas de su color de manera vertical, horizontal o diagonal.
Si los jugadores colocan sus 8 fichas y no han conseguido línea, la partida finaliza en empate.
Este juego está dirigido a jugadores de todas las edades, aunque es especialmente adecuado para aquellos que disfrutan de juegos abstractos y de estrategia. Y los disfrutarán tanto un público más adulto y experimentado como jugadores casuales o niños.
Gracias a su mecánica basada en la estrategia y la planificación, Qawale es una gran opción para trabajar en el aula. Ya que se trabajará el razonamiento lógico y estratégico que ayudan a la resolución de problemas. La visión espacial para identificar los diferentes patrones y la paciencia y concentración tan importantes a estas edades.
Por lo que nos encontramos ante un juego de estrategia que combina reglas sencillas con una gran profundidad táctica. Su rapidez y rejugabilidad lo hacen ideal tanto para sesiones casuales como para jugadores que buscan retos intelectuales. Y además, los componentes nos han encantado, las fichas de madera que imitan las piedras que se utilizan para formar las pilas con el mismo nombre del juego.
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