Sin embargo, la consejera real no está dispuesta a permitirlo y por ello decide encargar a Lisarda, una joven y astuta cortesana con pocos medios, intrigar en la corte con el objetivo de que su protegida sea coronada como reina de pleno derecho en contra de la voluntad del soberano.
El cometido de Lisarda no es fácil, pero con la ayuda del mercenario Petro el Cartaginés, pronto comenzará a urdir una estratagema para que reyes, nobles y demás señores de la corte caigan en sus redes.
En la estela de Aquitania o La cocinera de Castamar, Francisco Sempere nos adentra en los entresijos de la corte deLeón y nos cuenta la historia de Urraca I la Temeraria en una novela llena de aventuras, intrigas, deseo y luchas de poder.
Querido seguidores de “Mi esquinita de lectura”, hoy os vengo a comentar la primera novela histórica escrita por Francisco Sempere: “La cortesana de León”.
En esta novela viajamos al reino de León a comienzos el siglo XII, una España convulsa donde existen luchas de poder, los reinos de León, Galicia y Castilla se pelean por las coronas.
En estos momentos conoceremos a Doña Urraca de Zamora, hermana del rey Alfonso VI, mujer fuerte, inteligente y adelantada a su época, pues en un mundo predominantemente masculina va a luchar para que sea su sobrina, UNA MUJER, se convierta en la heredera y reina del reino.
Nos encontramos con dos Doñas Urracas, tía y sobrina, en una corte donde las intrigas, los amoríos y los engaños se van sucediendo.
Doña Urraca se siente muy anciana y va a encargar a una cortesana llamada Lisarda, que se encargue de que sus deseos para con su sobrina se cumplan.
Lisarda, la gran protagonista de nuestra novela. Una mujer a la que la vida ha tratado muy duramente, que vive de sus trabajos en la corte visitando a los más grandes y poderosos nobles, conocedora de todos los secretos de alcoba y secretos políticos que pueden comprometer a muchos de los nobles que habitan la corte.
Lisarda además de bella y voluptuosa es fuerte y diestra en el manejo de las armas, con la fuerza y destreza de un hombre la veremos defenderse en más de una ocasión.
Al lado de Lisarda encontramos a Petro el Cartaginés, con una historia propia que conoceremos en los primeros capítulos del libro. Entre ellos surgirá una extraña relación que no será el eje principal de la novela, pero que nos atrapará enseguida.
Unos protagonistas audaces y que se enfrentan a peligros que son capaces de asumir con astucia.
Veremos muchos nombres conocidos de la historia de España entre las páginas, Diego Gelmírez señor de Santiago de Compostela, los condes Gómez y Pedro González de Lara, Raimundo de Borgoña, el rey Alfonso VI y muchos más.
Esta etapa en la historia de España fue muy agitada y La reina Urraca fue una mujer muy adelantada en su tiempo, el autor ha introducido en la vida de la reina a Lisarda y desde este personaje conoceremos algunos hechos que fueron reales.
Muy bien documentada, no se hace pesada ni se dispersa en relatos de guerras y batallas, sino que nos introduce en la vida de las cortesanas y los habitantes de la época.
La prosa es exquisita, muy bien trabajados los diálogos y la narración es ágil y se lee con fluidez. Los capítulos cortos ayudan a que la lectura sea rápida.
Si tengo que poner un, pero… sería que me hubiese gustado que la relación entre Lisarda y Petro hubiese sido tratada con más profundidad, me hubiese gustado conocer más sobre ellos y tener más escenas juntos.
Predecible en todo el momento por quién sea conocedor de esta etapa de nuestra historia, incluso en la parte de la vida de Lisarda donde no nos llevamos demasiadas sorpresas.
Un relato para los amantes de la novela histórica, y para quién no le guste leer y darse demasiados sobresaltos.
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