'La mansión de los chocolates. Los años dorados'

 

Autor: Maria Nikolai

Editorial: Maeva

Sinopsis: 

Stuttgart, 1926. La joven e intrépida Serafina se instala en casa de su hermanastro, Víctor, en la espléndida propiedad familiar que todos llaman la Mansión de los Chocolates. La familia Rothmann es conocida más allá de los límites de la ciudad por sus refinadas creaciones de chocolate, que seducen a Serafina desde el primer momento. Con su espíritu aventurero, la joven se sumerge de lleno en las tentaciones que ofrecen los nuevos y emocionantes tiempos. Cuando conoce al atractivo Anton, se enamora perdidamente de él, pero el joven está a punto de comprometerse con otra persona. Mientras tanto, el imperio de los Rothmann se ve amenazado por inesperados actos de sabotaje, y a Serafina la persigue un oscuro capítulo de su pasado que no sabe cómo dejar atrás.

Hola a todas, ¿Recordáis cuando os comenté tras leer, “La mansión de los chocolates”, que veía tramas que podían dar lugar a nuevas novelas?, pues aquí os traigo hoy una nueva lectura de María Nikolai con los protagonistas que dejamos en aquella ocasión.

 

“La mansión de los chocolates, los años dorados”, nos vuelve a llevar a la ciudad alemana de Stuttgart, años después de acabar la primera guerra mundial. En los dorados años veinte, la ciudad tiene una alegre vida nocturna, cines y teatros de variedades están siempre llenos, la música de jazz se empieza a escuchar con fuerza y la economía vuelve a estar en auge tras la guerra, y en estos tiempos sucederá este nuevo relato de la familia Rothmann.

 

Siguen algunos de los personajes secundarios de la anterior novela y se combinan con otros nuevos.

 

Volvemos a encontrar con Judhit y Víctor que ahora tienen dos hijos Martín, casi adolescente ya estudia música en Paris y Vicky una pequeña que será una gran protagonista de la novela. La fábrica de chocolates ha pasado malos tiempos durante la contienda y ahora parece que vuelve a retomar su antiguo auge.

 

Los pequeños hermanos gemelos d Judhit se han convertido en unos jóvenes apuestos, Antón ha dejado el mundo del chocolate y trabaja fabricando y arreglando pianos, a la vez compone y tiene un pequeño grupo de jazz. El hermano más travieso Karl sigue en la fábrica de chocolates en administración y le gustaría que su hermana y cuñado le tuviesen más en cuenta en las grandes decisiones que se toman en la empresa, el desea hacer una modernización de toda la fábrica.

 

El padre de Víctor murió dejando sola a su hija de 17 años, hasta que cumpla la mayoría de edad debe quedarse al cuidado de su hermanastro, y así es como aparece Serafina en la fábrica de chocolates.

 

Serafina ha pasado su vida intentando saber quién fue su madre y se pregunta si aún puede ser que continúe con vida, ha estado investigando en Berlín sobre el tema y un día   unas personas le dicen que han conocido a su madre, que había sido bailarina de cabaret, llega al local donde la han citado, y se encuentra que le han tendido una trampa… a partir de ese momento Serafina cargará con un secreto que la mantiene apesadumbrada y la causará másde un problema. En el viaje a Stugart conoce en el tren a Lilou, representante de la gran bailarina Josephine Baker, Serafina se abrirá a ella y le contará su secreto, Lilou se ofrece a ayudarla. Esta trama es una de las partes importantes del relato.

 

Por otro lado, conoceremos a Elise, una jovencita que trabaja en unos grandes almacenes muy elegantes de la ciudad, que conoce a Antón Rothmann y se harán amigos.

 

La madre de Judhit y los gemelos, Helen, vive en Múnichy es gerente de una galería de exposiciones. Vive con George, al que conocemos también del relato anterior. Tienen una librería en la ciudad. En esta ocasión su peso en la trama es mucho menor.

 

Encontramos también al antiguo criado Robert que ya no trabaja con ellos, casado con Louisse y padre de la pequeña Mathilda, tendrá parte en la historia debido a la gran amistad que tiene su hija con Vicky.

 

El antiguo pretendiente de Judhit, Albert von Braum,regresa de América y nos mantendrá en tensión durante todo el relato.

 

Con todos estos personajes pasearemos por la ciudad, descubriremos como fabrican nuevos y exquisitos bombones, y entre líneas podremos escuchar la alegre música que surgía en esos años.

 

Hay una buena dosis de misterio, en la vida de Serafina y también dentro de la fábrica. Entre los jóvenes gemelos pinceladas de historias románticas y mucha alegría con las dos pequeñas.

 

María, como en la novela anterior, nos presenta una escritura ágil y muy cuidada, es un placer leer los capítulos de la novela, cortos para hacer la lectura aún más rápida.

 

Si no habéis leído la primera novela, no tendréis ningún problema en leer esta, bueno, el problema es que querréisconocer cómo se llegaron a casar Judhit y Víctor, yo recomiendo que la leáis también.

 

Y seguiremos sabiendo más sobre la familia Rothmann en el próximo libro de María Nikolai, yo lo estoy deseando.

 

Aconsejo este relato a los amantes de la novela costumbrista, a los amantes de una lectura sutil y elegante con un toque de misterio y romance.

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