'La mansión de los chocolates. Los años inciertos' #3

 Autor: María Nikolai

Editorial: Maeva

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Sinopsis: 

La tercera novela protagonizada por la familia Rothmann pone fin a la saga de La mansión de los chocolates, y transcurre entre Stuttgart, Berlín y Nueva York mientras el mundo vive tiempos inciertos.
En junio de 1936, Viktoria debe abandonar su formación en Francia y regresar a Stuttgart para asistir al funeral de su padre, Victor, que ha fallecido de forma repentina. Los tiempos son inciertos y el régimen nazi quiere apartar a Judith Rothmann, madre de Viktoria, de la dirección de la fábrica de chocolate, pero ella está decidida a proteger la empresa.Mientras la familia aúna fuerzas para luchar con todos los medios a su alcance, Andrew Miller, un apuesto norteamericano, llega a Stuttgart. Este fabricante de golosinas no solo perturba la vida emocional de Viktoria, sino que también ofrece a los Rothmann una solución a sus problemas. Pero ¿es en realidad quien dice ser? Cuando los acontecimientos se precipitan, sale a la luz un secreto familiar largamente guardado

 

Queridas amigas de “Mi esquinita de lectura”, el pasado año, por estas fechas, os comenté el libro de María Nikolai “La mansión de los chocolates: los años dorados”, y ahora os traigo el tercer y último título de la saga: “La mansión de los chocolates: los años inciertos”.

No puedo deciros que sea tan intenso como los dos anteriores, esta vez la trama es menos compleja y menos enigmática; lo que si os aseguro es que su lectura me ha resultado tan atractiva y agradable como la de los dos anteriores.

 

Volvemos a la fábrica de chocolates de la familia Rothmann en Stuttgart, acaba de morir Víctor el marido de Judith y por ello su hija menor Vicky debe de volver de Paris, donde trabaja en una afamada pastelería en la que ha aprendido mucho y se ha convertido en una experta pastelera apreciada por todos.

Los tiempos en Alemania no son los mismos que en las anteriores novelas, aquel esplendor de los años dorados ha desaparecido al comenzar los tiempos  del nacionalismo, la vida para los judíos empieza a ser muy complicada y también para las mujeres que empiezan a perder derechos adquiridos. Judhit se encuentra presionada por el régimen para abandonar el ejercicio de dirección de la fábrica, los suministros de chocolate comienzan a faltarle y la situación en la fábrica de chocolates es muy delicada.

Aparece un nuevo personaje en esta tercera parte, que traerá su halo de misterio, y que  será el gran protagonista de este relato. Desde el corazón de Manhattan, en Nueva York ,y descendiente de una familia de pasteleros americanos , conoceremos a Andrew Miller. ¿Qué tendrá que aportar a la familia Rothmann este nuevo personaje?... tendréis que leer la novela para descubrirlo.

También nos reencontraremos con los hermanos gemelos de Judith: Karl y Antón, que seguirán con su vida de antes y tendrán menos protagonismo en esta ocasión.

La madre de Judhit, Helena Rothmann volverá a sorprendernos … y ¡de qué modo! en uno de los capítulos , junto a su nieto Martín el cual tendrá una atormentada posición, pero a la vez una bonita historia con Mathilda en una trama secundaría de la novela.

 

Con todos estos personajes la acción está servida, probaremos  también nuevas creaciones chocolateras, asistiremos a los JJOO de 1936 en Berlín, que supusieron una fachada de esplendor para  tapar el movimiento nací que surgía en aquellos días. Las primeras televisiones donde se pudieron ver estos juegos también son objeto de la pluma de María Nikolai.

Como siempre le gusta a la autora, hace asomarse al texto  a personajes reales, esta vez conoceremos a la joven judía Helena Mayer que ganó un oro olímpico en esgrima y a la que dejaron participar los nacis como “coartada” y engañaron al mundo con ello. También aparece entre líneas Eleonor Jarret a la que no dejaron participar en natación, pero participó como reportera.

 

Para guinda del pastel, viajaremos a hasta Nueva York, para intentar, desde allí, salvar la fábrica    que tan felices nos ha hecho a través de estas tres novelas.

 

Una prosa impecable como nos tiene acostumbrados la autora, unos capítulos q devorarás y que se hacen muy cortos, una fantástica escritura que nos hace viajar y nos embauca con esos maravillosos olores de los chocolates. No te la puedes perder.

 

Recomiendo que leáis esta saga, no os defraudará, pero si no os gusta leer sagas, cualquiera de los libros es independiente del otro, no hace falta leer los tres. Pero es muy “apetecible” degustar la historia de la familia Rothmann de principio a fin.

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