La Segunda Guerra Mundial está apunto de terminar. Encarnáis a un grupo de cocineros del Ejército Rojo afanándose para cocinar unos platos con unos ingredientes que no tenéis. Pero cualquier cosa que podáis pillar por el frente (aunque a primera vista no parezca comestible) puede desmenuzarse y reconvertirse en la picadora de carne. Mientras a vuestros camaradas la comida les entre por los ojos, seguro que no dudarán de vuestras habilidades culinarias.
¿Esa salchicha no es bastante roja? Pues seguro que con unos clavos oxidados se arregla la cosa. ¿Ese puré tiene aspecto de vómito? Seguro que con un poco de arena amarillenta le damos el color adecuado. ¿Tan terrible os parece? Pues haced de tripas corazón, porque hay que alimentar a la Madre Patria, ¡y la Madre Patria está hambrienta!. Pero cuidado: si queréis subir en el escalafón y pasar de pinches a chefs tendréis que vigilar un poco y no acabar matando a vuestros comensales...
Un juego de DEVIR
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El objetivo del juego es conseguir la mezcla perfecta de colores en cada comida para que se asemeje lo más posible al plato a imitar. Pero tenéis que tener cuidado con los ingredientes que utilizáis para que la Madre Patria no se intoxique. Es un juego cooperativo, por lo que podéis hablar entre vosotros pero sin enseñaros las cartas para conseguir la mezcla perfecta.
Lo más importante a tener en cuenta es el color de la carta y la toxicidad de la misma (que se indica en la parte superior. En la app al lado derecho encontraréis un termómetro que irá subiendo según lo tóxicos que sean los ingredientes que utilicéis.
En cada misión tendréis un objetivo principal y otros objetivos extra a cumplir.
Y ahora pensaréis muy bien...y las reglas... ¿cuales son? ¡Pues eso es de lo mejor del juego!.
Os descargaréis la app y ella misma os irá diciendo las cartas que tenéis que repartir (depende del número de jugadores) o las que tenéis que robar al finalizar la ronda. Os irá diciendo los objetivos y cuando podéis desbloquear y añadir a la baraja principal las siguientes cartas de capítulo.
Con la cámara frontal la app escanea el código qr de la carta que utilizas y te dice el nivel de coincidencia con el plato a replicar.
Existen dos modos de juego:
Modo historia: Iréis desbloqueando mazos.
Modo desafío: Intentaréis superar vuestras propias puntuaciones.
Nos encontramos ante un juego no apto para daltónicos y mecánicamente sencillísimo.
Su principal dificultad consiste en combinar los colores adecuadamente para replicar el plato sin envenenar a nuestros comensales.
El espectro de colores es amplísimo, y lo que para un jugador puede resultar un tono verdoso, para otro puede ser más azulado. Por lo que las confusiones y las risas están aseguradas.
La propuesta que os traemos hoy va dirigida a un público juvenil - adulto.
Escala bien a cualquier número de jugadores (a más jugadores nos ha parecido un poco más difícil porque hay que combinar más colores). Además ofrece una variante en solitario que funciona muy bien.
Un juego cooperativo en el que la unión hará la fuerza y cuando os queráis dar cuenta llevaréis jugando un buen rato.
Ocupa muy poco por lo que no será un estorbo en vuestras estanterías, merece la pena tenerlo por su originalidad.
Soviet Kitchen se ha convertido en uno de los grandes descubrimientos del año, por su originalidad, fácil mecanismo y porque engancha un montón. Un juego de esos con los que te picas si no consigues los objetivos y hasta que no ganas no paras. Además, nosotros somos muy competitivos y no nos ha servido con conseguir el objetivo principal porque también queríamos los extras.
Estéticamente no es de los que más nos llamen la atención porque nos gustan más otro tipo de ilustraciones. Aunque con la temática encajan perfectamente. Si sois de esos que solo compráis juegos 'bonitos' estéticamente para vuestros gustos os animamos a que no descartéis este Soviet Kitchen si 'no os llama' porque os va a encantar.
La app facilita la mecánica porque os va a decir los pasos en todo momento y aunque parezca un 'juegochorra' por lo de la combinación de colores, tiene su aquel. Ya que tenéis que estar pendientes de no intoxicar a vuestros comensales y de las cartas que usar para que un jugador no la pifie con la carta que elija (porque no tiene otra).
El hecho de que cada capítulo añada nuevas cartas con diferentes colores o acciones, o nuevas comandas hace que el juego nunca sea igual.
Un juego muy portable que puede jugarse hasta con seis jugadores o en modo solitario.
Nosotros os recomendamos que carguéis bien el teléfono móvil porque no vais a poder parar de jugar.
Mi puntuación es…
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Hola guapi!
ResponderEliminarQue chulo se ve el juego, y divertido el poder combinar las cosas. Seguro que intoxicaría a la gente jaja
Le echaré un vistazo ^^
Gracias por mostrárnoslo, un besiin!